Unos de los vicios del peronismo es el de frecuentemente ningunear al resto. Pensar que todo lo que hay fuera de su universo no existe o tiene poca entidad como para considerarlo relevante. Así que la natural interna pareciera ocupar todo el espacio disponible.
Veamos que sucede en La Plata. Aqui tenemos 4 listas que abiertamente adhieren al FpV:
1.- La lista oficialista de Julio Alak
2.- La lista de Pablito Bruera
3.- La de Castagneto
4.- La de Guillermo Justo Chavez
Cada una de ellas usa el logo del FpV y algunas la consabida foto con el presi.
Además, pertenecen al espacio peronista:
5.- La lista de Oscar "soy yo" Vaudagna
6.- La lista de Huguito Mársico
Y perdonen si me olvido de alguno.
Al principio parece que la idea era "sumar" y desde Nación se alentaban a los diversos postulantes a "caminar" los distritos cada cual llevando su respectivo estandarte y todos "sumando" para las huestes K. Esto se reflejaba en que distintos funcionarios nacionales apadrinaban a cada una de las opciones (ej: Zanini a Alak; Alicia K a Castagneto) En cada una de estas agrupaciones se guardaba la esperanza de que en algún momento iba a llegar el "dedazo" de arriba que coronaría al propio como el candidato oficial y el resto debería negociar, largarse a competir a la intemperie o esperar que alguna ambulancia los recoja. Con el andar del tiempo y ante la falta de definición, la onda parecía ser la bendición a todos permitiéndoles a los diferentes referentes "colgarse" de la boleta de Cristina y Scioli (y la muy importante boleta de candidatos a diputados nacionales de la que pocos hablan) y "que gane el más mejor"
Pero ahora parece que la fragmentación ha llegado a límites insoportables corriendose el riesgo de que en el afán de legitimarse como la "auténtica expresión del kirchnerismo" en las generales (con la previsible queja de "otra vez nos quieren hacer votar en la interna peronista" de parte del resto del espectro político) todos pierdan. Esto lo leí en la página de Agencia Nova:
"Por su parte el Frente por la Victoria debe sufrir su propio fenómeno de concertación interno en los distritos para unificar criterios detrás de un candidato. Parece ser que ante un extremo divisionismo algunos referentes nacionales han optado por ser el eventual moderador de este panel de competidores, algunos muy reticentes al diálogo.
Da la impresión de haberse practicado en los últimos días el denominado “método Moreno”, y no en alusión al Secretario de Comercio, Guillermo Moreno y sus formas de establecer el índice inflacionario, sino en referencia a Carlos "Cuto" Moreno, apoderado del Frente por la Victoria.
El dirigente desembarcó en Lomas de Zamora y dio su parecer sobre el mejor posicionado para gobernar ese distrito del conurbano. Dijo que las encuestas lo ubican al diputado Osvaldo Mércuri en la cima y que el actual intendente Jorge Rossi no está con una administración a la altura de las circunstancias de quien espera un segundo respaldo para una reelección.
Más allá de si hay o no un interés en esas declaraciones, lo cierto es que su condición de apoderado y de referente nacional da cuenta de un anticipo de lo que puede venir en torno de cómo se van a unificar filas en las manifestaciones locales del Frente oficialista.
Donde la compulsa distrital sea intensa y con varios competidores, dirigentes nacionales darán su aviso. Será la primera etapa de prevención antes que alguna señal inequívoca e indubitable desde lo más encumbrado del poder postule a unos en detrimento de otros que podrían quedar muy heridos y fuera de foco.
Comenzó entonces, la etapa de las señales y de las advertencias y cada candidato, provenga del peronismo o del área transversal, deberá demostrar sus mejores aptitudes para decodificar el mensaje, sea este público o vía interna hacia las mesas de negociación. (Agencia NOVA)"
Así que ahora "se arreglan entre Uds. o decidimos nosotros." Lo quiero ver.
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