Estaba leyendo esta nota de Impulso Baires que cita un reportaje de Radio Provincia al Senador socialista por la CC Rubén Guistiniani y se me ocurrió que este conflicto algunas cosas buenas ha traído. Leamos que dijo el Senador:
“Se está hablando de plata, entonces, todos deben dejar un pedazo: el gobierno nacional, que tuvo un esquema exitoso a nivel macroeconómico y legítimamente lo quiere mantener, aunque debiera rever algunas cuestiones; tiene que entender que el esquema recaudatorio de las retenciones va a tener que ser compensando con alguna otra recaudación”, manifestó Giustiniani. En tanto, añadió que “nadie discute las retenciones”, sino que “se está hablando de niveles”. De ese modo, estimó que “el gobierno tendrá que obtener recursos de la minería, del petróleo o de otro lado”
Podríamos decir que le da un enfoque al asunto exclusivamente fiscal: recauden menos de esto, dejen "en paz al campo" vayanle a cobrar a esos otros, cuando el tema es más amplio e incluye aspectos de combate al monocultivo y de seguridad alimenaria. Pero bueno, vamos a lo que íbamos.
Lo que veo positivo de todo esto es que el conflicto desnudó aspectos que en tiempos más calmos permanecen en silencio y obligó al oficialismo a hacer algo al respecto cuanto menos en defensa propia. Lo que citábamos en los dos posts anteriores es un paso al frente que se aceleró gracias al conflicto. Más aún. Si mal no recuerdo el senador del FpV Urquía, propietario de aceitera Deheza había logrado en el Senado la modificación de un artículo de la Ley 21.453 que permitía maniobras con los certificados de exportación. El decreto sancionado ayer corrige (según el Rulo de la Torre en parte) esta modificación. Además, que se empiece a hablar lo que aporta el petroleo, la minería, etc. es bueno ya de por si.
¿Y SI SALE BIEN?
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Hace 2 horas
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