El Colo y la crónica

Luego de la reunión de la semana pasada en La Plata del Colo De Narváez con su desorientada tropa no podía faltar la nota de análisis de Silvia Mercado en LPO, una periodista que suele cepillarlo duro y parejo en sus crónicas.

Así la empieza, con esta frase del Colo:

“Macri no es peronista. Representa a la derecha. Tenemos que caminar la provincia de Buenos Aires sin él, que jugará de la vereda de enfrente”.

Esto fue confirmado por el propio Macri el sábado pasado en La Plata cuando en ocasión de la apertura de un local del PRO frente a la Legislatura lanzó como candidato a gobernador a su primo Jorge. Algunos en el coloradismo ven a esto como una estrategia de negociación pero hoy por hoy los separa un abismo como la frase del Colo parece confirmar.

Volvamos a la nota de LPO. Había bastante que discutir luego de las fugas en sus bloques parlamentarios de la PBA y de su armador Emiio Monzó que se fue a conformar un "sub45 disidente" pero alejado del colombiano. En su lugar el Colo nombró como armador boanerense al porteño Daniel Amoroso (a quien debería proveer de una guía Filcar y un mapa de la PBA):

Amoroso, dicen, es el principal enemigo de Macri en la Legislatura porteña. Y la decisión, tendría que ver con otra: el respaldo de Mauricio a la candidatura a gobernador bonaerense de su primo Jorge Macri.

Por cierto, Amoroso no la tendrá fácil. De Narváez lo llevó a la reunión, pero no lo presentó formalmente en sus nuevas funciones. Ordenado, el legislador porteño tampoco abrió la boca. Es probable que no supiera tampoco qué decir. O, como dijo uno de los presentes a LPO, “tal vez tenía miedo de decir algo inconveniente, y que Francisco lo dejara en banda, y perderse entre las diagonales de La Plata”.

Respecto de las fugas De Narváez no quiere más sorpresas y desafió:

“El que quiera irse de este espacio, que se vaya ya”

Y el final es a toda orquesta con las declaraciones de un dirigente de su espacio en estricto off the record:

“Si no decidimos qué hacer, en diciembre todo está terminado para nosotros; De Narváez puede arreglar cualquier cosa, incluso dejar todo, y nosotros quedamos colgados de una palmera”, explicó una fuente a este portal.

- ¿Es verdad que su mejor opción es Scioli presidente?, preguntó LPO.

- “Tal vez era, antes. Ahora todo volvió a cambiar. Nos dijo que salgamos a caminarle la provincia a Scioli, como compitiendo con él. Es difícil entender su estrategia. Y tal vez no tenga ninguna”.

Estos zigzagueos los padecieron hasta el cansancio sus aliados del Peronismo Federal que en la última cumbre –a la que una vez más faltó De Narváez- tomaron una decisión razonable: “ya no lo tomamos en serio”, afirmó uno de ellos a LPO. “Me parece que todavía no se dio cuenta que esta perdiendo y por mucho la elección, que ya no es el mismo de antes”, agregó el dirigente, que conoce como pocos la provincia que aspira a gobernar el empresario.

Sombrío panorama le pintan al Colorado, que más allá de las infidencias atribuidas a algún asistente a las reuniones, las fugas, desplazamientos y una linea de conducción errática son realidades innegables en el espacio del hombre que se creyó en la cima el 28 de junio del año pasado.