Debatiendo Santa Fe

Se dice que los debates no cambian nada, que no influyen ante una tendencia de voto clara en una elección pero a nosotros nos parece que más allá de eso son una oportunidad magnífica de ver una confrontación de ideas entre distintas propuestas políticas que están demasiado acostumbradas a declamar en solitario, muchas veces lamentablemente para descalificar a los contrarios y a veces para dar alguna pauta de un linea de gestión en el caso de un eventual triunfo.

El debate de hoy entre los tres candidatos a gobernador de Santa Fe mostró claramente el perfil de cada una de las propuestas y de los candidatos en disputa: Bonfatti con un aire ganador, defendiendo las gestiones del FPCS en Rosario y la provincia, Agustín Rossi apuntándole al oficialismo provincial armado de datos, cifras y cuadros y Miguel Del Sel poniendo el acento en el contacto personal de estos tres meses de recorrida de campaña, recurriendo demasiado al "yo vi que tal hospital/comisaría se cae a pedazos" o experiencias propias que lo alejen lo más posible de un perfil político y que lo acerquen a un hombre común que se metió en política para aportar el sentido común que según la antipolítica los dirigentes políticos carecen.

Agustín lució muy sólido, claro y con argumentos a la hora de discutirle a Bonfatti quien fue su blanco a lo largo de todo el debate, conciente de que tiene sobre sus espaldas la acusación fácil de ser "un delgado del gobierno nacional" que quiso explotar sobretodo Del Sel. Este delicado equilibrio entre tener una propuesta local y ser parte de un proyecto nacional lo mantuvo con altura. Bonfatti fue la expresión de la continuidad de un proceso que tiene alta aceptación en imagen en las encuestas y repitio la fórmula de Binner acerca de "lo que la Nación nos debe en tal o cual rubro" y fue casi nula la referencia a que su mentor y su partido político encabezan una alianza nacional con aspiraciones de conducir a la república. Del Sel haría agua por todos lados si se le pide alguna precisión acerca de cualquier tema, más allá de las buenas intenciones de "solucionarle los problemas a la gente". Ninguno de los otros dos candidatos lo hizo por lo que sorteó bien el desafío de debatir con dos hombres con una vida dedicada a la cuestión pública.

Cambiará la historia este debate? Probablemente no lo haga o será dificil saberlo si es por su causa que sucede pero ha sido un gusto haberlo presenciado.

* El debate completo está aca en el blog de Marcela Fumale, Divagues de una inkorregible